martes, 15 de diciembre de 2009

UNA MIRADA, A UN AMOR, QUE NO SE OLVIDA



Respiro tu alma sin que tú lo notes, pero te sigo mirando, solo de reojo. Caminas de un lado hacia otro sin prisa, aunque esa mirada triste que camina contigo, busca algo en la soledad de la noche.

Te miro nuevamente sin que tú lo notes, desplazo al tiempo y lo dejo a un lado, observo tu rostro y tus cabellos negros. Observo tu esencia de niña bonita y te miro nuevamente sin que tú lo notes.
Camino a tu lado, camino contigo, camino con tu alma aunque tú, no lo notes.

Dibujo en mi mente tu rostro de niña, repaso tus ojos a cada instante. Desplazo de mi mente la soledad de la vida y refresco mi alma con tu breve sonrisa. Rezo en las noches tus 28 miradas, viven en mis sueños tus cabellos negros. Camino en la vida susurrando al viendo, que esa esencia tuya, siempre valla conmigo.

Te sigo mirando aunque no lo notes. Te busco en las noches, pese al olvido, te buscan mis ojos, te busca mi alma y te busca el duende de este trovador triste.

Respiros tres veces, aunque no lo notes. Respiro tu esencia para sentirme vivo. Camino contigo sin que tú lo notes. Camino con mi alma. Camino contigo.

Tu mitrada de niña bonita me pide que te bese, pero antes, paseo por tu alma, como tú por la mía, para llegar al clímax. Nos miramos varias veces, para que nuestras almas más se enamoren y, así encontrar, ese amor que buscamos de por vida.
Nos miramos suavemente en un salón vació, que mas parece, para nosotros un mudo perfecto de primavera. Caminamos juntos horas de horas en las noches. A veces, corremos como locos por las calles, solo para saber de donde venimos y hacia donde vamos.

Nos miramos suavemente a cada instante para decirnos muchas veces que nos amamos. Y, ahí, nos embraga esa corazonada de amor eterno poco a poco, sin que nadie nos moleste, nos perdemos en nuestro mundo construido solo para nosotros.

Nos miramos cien veces, doscientas veces, y siguen las miradas devorándose una a una en una jungla de primavera.

Solo dime que me quieres y
yo te daré mi alma,
pero, dime que me quieres y
te diere que serás mía.
pero, dime que me amas y
nunca te abandonare.

1 comentario: